viernes, 28 de marzo de 2008

Boletín "El Anónimo" Nº 10

por: Paco Vallejos



Hola amigos: Aquí les mando mis comentarios del concurso de Marinera 2008 que organizó el club Libertad de Trujillo.

Con Respecto a la organización:
1)
No se repartieron programas (de los eventos de la semana), esto se hizo el último día, cuando ya terminaba el concurso. Tampoco vimos afiches.
2) No había notas en el club sobre el congreso y nadie sabía dar información.
3) A los bailarines no se les dio ni un vaso de agua, durante los cuatro días del concurso. Sin embargo los concursos mal llamados “chicos” si dan un refresco, eso es calidad organizativa.
4) No había camarines para cambiarse. Todos lo hacían delante del público en las graderías.
5) Los baños estaban en pésimas condiciones (anegados de pichi, igual que los años anteriores).
6) No había ningún tópico para casos de emergencia. Las chicas con heridas en los pies solo se ponían cinta, y así tenían que entrar a los baños sucios.
7) Las personas que inscribían a los participantes se quejaron de las pésimas condiciones de trabajo (sin computadoras) que les impedían inscribir a una mayor velocidad y lo peor es que estaban trabajando AD HONOREN, es decir sin recibir ninguna remuneración por su trabajo. A cuantos trabajadores más estarán explotando los Burmesters.
8) Habían demasiadas gigantografías colgadas en el techo del coliseo, de tal manera que una tribuna no podía ver la que estaba al frente.
9) La primera banda que inició el concurso fue un desastre. Felizmente la cambiaron.
10) Ningún jurado es conocido en el mundo de la investigación o conocimiento de la Marinera Norteña, como nos engañan impunemente en sus bases. A esto se le llama FRAUDE. El ante año pasado, el club, mandó una carta a la Escuela de Folklore “José María Arguedas” pidiendo jurados, pero les negaron (felizmente, iban a servir de tontos útiles, porque ya tenían a sus “campeones”).

Con Respecto a la Prensa:
1)
Todos los periódicos de Trujillo, incluyendo a la Industria, solo hablaban superficialidades del concurso, pero no hablaban de lo malo y criticable de la organización.

2) La animación del concurso que hizo la conductora del Canal 7, Fátima Saldonit, fue desastroso. Sin un libreto por parte de la producción y sin asesoramiento de alguna persona conocedora de la Marinera, la pobre hizo el “papelón” de su vida. Además que se perdió la gran oportunidad de dar a conocer, a nivel nacional, la calidad y fundamento social e histórico de la marinera como Patrimonio Cultural del Perú. Yo, como Ministro de Educación, despediría a todo el personal de la producción del canal del Estado, por su inoperancia e incapacidad en la transmisión de eventos culturales. La conductora no tenía nada que leer sobre nuestro baile nacional y solo se mantenía frente a las cámaras repitiendo la misma pregunta a todos los bailarines: ¿Y que se sintió al bailar? Una verdadera lástima y oportunidad de educar e informar adecuadamente al país y al mundo sobre uno de nuestros Patrimonios Culturales Peruanos.

3) Una felicitación al diario “El Comercio” de Lima por su total imparcialidad y profesionalismo periodístico, al tratar el tema, en el excelente artículo en la revista sabatina “Somos” Nº 1104. Allí el periodista hace un análisis justo y realista de lo que vio en el concurso, no se ha dejado llevar por el glamour y arribismo de la prensa trujillana (¡aprendan periodistas de “La Industria” y pónganse los pantalones!).
La prensa debe ser imparcial y no venderse a nadie. “La Industria” de Trujillo piensa que hace bien callándose todo lo malo del concurso, solo por el hecho de ser auspiciador del mismo; lo que lo convierte en cómplice.
Deberían aprender del diario “El Comercio” de Lima, que informó del evento con total objetividad, sin chauvinismos trujillanistas. Hay un dicho que dice: “Dime con quien andas, y te diré quien eres”. El periodismo cuando carece de personalidad, pierde credibilidad, pierde su rol de fiscalizador, de informador y de formador de conciencias analíticas y deliberantes. Un jalón de orejas para el diario “La Industria” de Trujillo.

En su artículo: “El Zapateo de los Dioses”, publicado en la revista “Somos” del diario “El Comercio” del sábado 2 de febrero del 2008, el periodista Aldo Vela nos dice que la presentación de Renato Benavides y Evelyn Bellido “fue una osadía” (por no decir otra cosa); y luego dice que emplazó a la banda de músicos (hizo parar la marinera que estaban tocando) para que “le toquen la marinera que mejor le cuadran a sus botas” Que tales campeones, que solo pueden bailar una sola marinera ensayada. ¿Y la creatividad?, ¿Y la naturalidad?, ¿Y la espontaneidad? ¿Habrán pasado también a la historia,…o sea que ya son parte de la Tradición? Hayyyy….. ¡De los salvadores de la marinera líbranos Señor!
Luego nos dice que: “Ronald Fernández, de la Escuela “Moche”, es uno de los pocos profesores empecinados en defender la espontaneidad de la danza”, como parte de la Marinera tradicional que es la que ha dado origen a los concursos y las academias, y que todavía se baila en los pueblos norteños.
También nos cuenta que la excelente pareja: “Arnold Gutiérrez y Giannin Vilca tuvieron que decirle chau a los sueños, cuando unos pifiados (por todo el coliseo) Mauricio Wong y su pareja se elevaron al más alto de los podios. Ni modo”. ¡Billetito manda!

El periodista (que no es docto, ni versado en marinera) nos dice con respecto al concurso de coreografías: “Porque, cuando se dice que van a premiar coreografías, lo primero que se le viene a la cabeza a uno, es que se va a felicitar al que mejor trascienda en el arte de componer bailes, armar pasos y figuras de una danza, tal como reza en el diccionario. Pero cuando el pisqueño taller de danzas “Estampas del Perú”, aparece ovacionado porque sus muchachos desfilan marcialmente al compás de una marinera,…o porque sus chicas, ataviadas cual gendarmes de tránsito, se descalzan mientras resuena la tarola, o cuando los bailarines soplan silbatos al compás de “Así baila mi Trujillana”, se comprende que la empatía con el respetable va mas allá de la solidaridad que despiertan esos crespones negros legados por el terremoto. Pero… ¿y el baile?” ¡Honssstaaaa….! ¡Se evaporó!

Dentro de este artículo hay una foto muy elocuente titulada “Gloria en Lata”, (pag. 36): Está la foto de Monica Grados Aurich, celebrando su “triunfo” con una lata de cerveza. Seguido dice lo siguiente: “…aunque muchos conocedores no quedaron contentos con su manejó de falda. Su triunfo en todo caso se celebró con globos y confeti dispuestos con precavida antelación”.
Creo que no solamente los conocedores quedaron inconformes, sino también las ocho mil almas que la pifiaron (en todo el coliseo) al escuchar su nombre como ganadora de adultos. Luego soltaron los globos y el confetti, solo faltó que repartieran afiches con los nombres de los ganadores. ¡Por la plata baila el perro, por el oro baila el mono; por la plata y por el oro baila juntos perro y mono!

Con respecto al suplemento comercial sobre la Marinera que publicó El Comercio, el lunes 21 de Enero del 2008, allí si que hay darles un pequeño jalón de orejas.
Primero, porque los artículos son totalmente intrascendentes y desinformativos, además de que no se han asesorado para verificar si lo que dicen allí es cierto o no. Las fotos son un desastre: en la página principal la reina del concurso esta usando una blusa de Rechiliú llena de huecos, que no pertenece al traje típico norteño y pulseras en el brazo, que tampoco son de uso norteño para bailar marinera. Al parecer la reina fue asesorada en Chile, ya que fue reina del concurso realizado allá.
En el interior hay una entrevista a Fernando Burmester (presidente del club organizador). Allí el periodista le hace algunas preguntas y el responde con imprecisiones como que: “…de las academias de Trujillo salen la mayor cantidad de parejas participantes” . Lo cual no es cierto, ya que en Trujillo no existen más de 4 academias reconocidas y pequeños talleres que en total no llegan ni a la cuarta parte de participantes en el concurso de Trujillo. En cambio, en Lima existen más de 100 academias y talleres, que suman más que todas las parejas participantes en el concurso del club Libertad. Sin embargo sumamos más del 80% de participantes limeños.
Si los limeños no van a al concurso del club Libertad, pues este se va al agua. Es decir, los limeños hacemos el concurso al club. ¿Qué pasaría si el próximo año no vamos y lo boicoteamos por ser un concurso mafioso y racista? ¿Alguna vez has visto campeonar a alguien de apellido Mamani o Chafloque?

En otro pasaje, el periodista le pregunta: Teniendo en cuenta que se baila en todo el norte, ¿Por qué a Trujillo se del debe considerar como cuna de la Marinera? A lo que él responde:
“Porque aquí comenzó el gran trabajo de difundirla, de amarla, de ubicarla en el sitial que se merece, y de convertirla de un baile de fin de fiesta, al baile de todas las fiestas”.
Este sujeto no sabe lo que dice:
Primero, porque la cuna es el nacimiento de la Marinera y esta fue en Lima donde nació, no en Trujillo.
Segundo, que la Marinera está difundida en todo el Perú y no precisamente por ellos, desde hace ya dos siglos atrás e irradiada por todos los pueblos de la costa, sierra y selva. Mucho antes que naciera el tatarabuelo de don Guillermo Ganoza.
Tercero, que ellos (los del club) solo aman a la plata y las componendas sociales, sino pregúntenle ¿cuanta plata invierten en la preservación de la Marinera? La respuesta es simple: Ni un centavo. Muy por el contrario, están ayudando a la extinción de todas las variantes norteñas de Marinera.
Cuarto, dice que la han convertido “de un baile de fin de fiesta, al baile de todas las fiestas”. Esto es cierto, la Marinera era un baile de fin de fiesta para la “alta” sociedad de Trujillo, es decir que solo ponían marinera para botar a los invitados. Ahora no, han visto que este producto cultural de los pueblos norteños les puede servir para ganar dinero fácil y sin pagar impuestos. ¡Ahora, ellos aman la Marinera!

En la pág. 9 del referido suplemento, en el artículo: “Atuendos con Encanto Peruano”, han colocado tres fotos por demás erradas. La primera foto muestra un moño con un arreglo de flores que pertenece al folklore panameño. La segunda foto muestra un traje de la sierra de Ayacucho (del pueblo de Chaviña, límite con Ica). Y la tercera foto muestra un traje de fantasía, de gasa transparente, que tampoco pertenece al traje típico del norte peruano. ¿Qué pachó?.... ¡Se les chispoteó!
Al leer el artículo me doy con una sorpresa, una de las personas entrevistada para hablar sobre los trajes de marinera del norte del Perú, es doña Monica Aurich de Grados, ¿Si, Aunque Ud. no lo Crea! Y es presentada como (¡escuchen y lean bien!) DISEÑADORA DE TRAJES TIPICOS (¡Me quiero morir!) Ahora escuchen lo que dice esta especialista en vestido típico de marinera. “El Anaco era una especie de jamper (¿jamper norteño prehispanico?) de dos piezas y una faja en la cintura”. Esto es una burrada “cultural” periodística a nivel nacional.
Primero, porque el anaco es una sola pieza y no fue solo de uso pre-hispanico, sino que se usó hasta inicios de 1900, como lo prueban las fotos que tomó Enrique Brunnig.
Segundo, que la faja no es parte del anaco, solamente es un accesorio a ella.
Otro error garrafal es cuando dice: "El traje tradicional es el llamado gamonal que tiene un cuello Nerú, que era utilizado por los hacendados”. Esta es otra falsedad, ya que este traje (gamonal) no era tradicional en el pueblo que bailaba marinera. Y los hacendados que si usaban este traje, de moda en europa, no bailaban marinera, sino los bailes de moda en Estados Unidos y Europa (Fox Trot, One Step, Charleston, Swing, Tango, Cuadrillas Francesas, Vals Vienes, etc. Noooo, la marinera era el baile de los cholos, y el cholo no usaba este tipo de terno, sino el tradicional que usa hasta el día de hoy; con o sin zapatos.

En suma, es una edición que deja mucho que desear. El año pasado fue igual. No le ponen el interés cultural que merece nuestro baile nacional en su suplemento. ¡Ojito, señores de “El Comercio”! , ¿Qué dirá a todo esto don Francisco Miro Quezada?

Al clan Burmester no le interesa promocionar culturalmente a la marinera, solo le interesa que vaya la mayor cantidad de gente para que tengan más entradas, más dinero. Por eso, para el próximo año, van abrir la categoría Minusválidos y niños Dawn, para que les hagan el SHOW y jalen mas gente a su alicaído concurso. Van a lucrar ahora con los discapacitados, cuando ellos son los discapacitados culturales.

En el diario el comercio del 4 de febrero del 2007 (pag. a22), en el artículo titulado “La Marinera en Circuito Cerrado”, el periodista y abogado Francisco Vallejos (mi homónimo) le hace una pregunta al presidente del club Libertad:

¿Cuánto se gana en el concurso de Marinera?, a lo cual responde:
“El concurso de marinera antes no daba utilidades. Toda la organización es privada. El club vive del concurso nacional de marinera, eso es totalmente cierto. Si no fuera así, el club ya hubiera desaparecido”.
Como pueden leer, no respondió a la pregunta. Sin embargo en su afirmación de que “toda la organización es privada”, entonces porque hace uso de un Patrimonio Cultural que legalmente solo puede ser usufructuado por el estado. De de acuerdo a ley, el manejo o uso de un Patrimonio Cultural solo puede ser manejado por una entidad privada cuando está siendo fiscalizada por el INC. Cosa que jamás ha ocurrido en Trujillo; es mas, don Cristóbal Campana, cuando era director del INC de Trujillo, quiso intervenir (como lo estipula la ley) en la fiscalización del uso de la marinera y los directivos de este club, no lo dejaron entrar, aduciendo de ser un club privado. ¿Será que las leyes en el Perú están hechas para el que tiene plata? ¿Será Vladimiro abogado del club, o será un tal Gamboa? Hummm…

¿En que se gastan los ingresos del concurso?
“Muchos piensan que todo es ingreso en la marinera, pero la verdad es que hay muchos gastos operativos y también los premios a los ganadores”.
Aquí don Fernandito, intenta confundir al periodista, cuando todos sabemos que los ingresos millonarios de las entradas, están separados de los aportes de dinero que hacen los auspiciadores para los ganadores. Aparte de esto, están los ingresos por los primeros puestos (Wong, Rossi, Grados Aurich,…, etc. etc. etc.) y los premios que no son entregados.

Con respecto a los jurados, nos dice el periodista: “Ya sabrá el club Libertad, organizador de la justa, las razones en las que se basa para elegir a los responsables de los veredictos”.
Esto es porque no existe ninguna fundamentación para elegir como jurados a personas neófitas en marinera, solo por el hecho de ser socios o amigos del club libertad. Es decir un concurso sin las garantías de un jurado conocedor de nuestro Patrimonio Cultural norteño. ¿Y, así se ufanan de ser el mejor concurso del país?, ¡Donde los jurados son unos ignorantes en el tema de la Marinera! ¡…y no presentan currículum alguno que sustente su denominación!. ¡Que van a presentar, si son unos analfabetos en folklore norteño!..... ¡No pues, no mojen que no hay quien planche!

Con respecto a las Categorías:
Gran público del coliseo pifio largamente a tres categorías, porque fue una elección evidentemente trafeada. Donde los que bailaban con una calidad superior quedaron eliminados y los que bailaron totalmente mal o regular, fueron elegidos como ganadores. Con excepciones en dos categorías. Pero veamos estos casos uno por uno:

1) Categoría Pre Infantes: Anthony López y Melisa Aguirre R.
Buen baile de ambos, aunque un poquito de exageración por parte de él. La pareja con la letra “A” también bailaron muy bien. Entre ellos estaba el primer lugar.

2) Categoría Infantes: Luís Valle Murillo y Cristina Miyagusuku
Excelente perfomance de la “chinita” que desde el comienzo dio muestras de una gran personalidad de baile. Su pareja la acompañó muy bien. Ella por momentos abusaba del faldeo. Ojala siga creciendo en su baile y no la roboticen, como a muchas niñas que las obligan a bailar imitando a los adultos.

3) Categoría Infantil: Jean Castro y Yanira Gonzáles
En esta categoría fueron eliminadas parejas con mucho mejor baile, que los clasificados a la final, como la 239, 221 y 238. De las tres parejas de la final, la que quedó en segundo lugar era la mejor y la del tercer lugar no tenía nada que hacer allí. La pareja ganadora era muy plástica, pero no tenía recursos de baile, solo hacían figuras pre-ensayadas y repetitivas; es decir no había la emoción de la creatividad y la espontaneidad en su baile. A él le he visto mejores desempeños, en cuanto a ella, fue muy esquemática.

4) Categoría Junior: Mauricio Wong y Christie Ñamuis
Esta categoría también recibió un rotundo ¡NOOOOOO…! Por parte de las tribunas del coliseo Gran Chimú y luego vinieron las pifias. Pero...¿que culpa tiene el chico Wong de que su papi tenga dinero, de la venta de su supermercado a los chilenos? Aunque todavía le falte calidad de baile.
El diario La Industria de Trujillo puso como titular “Limeños ganaron en Junior: Robaron aplausos”. Yo creo que robaron algo más que aplausos.
Además informaron que fueron aplaudidos por todo el coliseo, sin embargo yo estuve en el coliseo y lo que vi era otra cosa: un abucheo total de toda la gente del coliseo. ¿Porqué un diario no informa con veracidad?, porque intenta tapar el sol con un dedo, ¿acaso no pierde credibilidad cuando engaña con falsas noticias? ¿Qué pasará por la cabeza de doña Karina de Orbegozo de “La Industria”, que cubre el concurso del club Libertad?

5) Categoría Juvenil: Renzo Arana y Romina Rossi
Escuché en el club Libertad que Romina Rossi es sobrina del gerente general de Plaza Vea, quien es auspiciador del concurso. Si esto fuera cierto, entonces que casualidad que campeone ¿No creen? ¿O sea, si yo auspicio el próximo año, puedo pedir un primer lugar? …. ¡Así que sobrinas, prepárense! ¡Ah, y no se olviden de pegar las quijadas, que está de moda, no es cierto Romina?

6) Categoría Adultos: José Terrones y Mónica Grados
Fue la pareja más pifiada de la noche. Ella estaba ya voceada como ganadora desde el año pasado. Esto porque su mamá Mónica Aurich, que organiza, por la Municipalidad de Lima, el concurso “Ciudad de Lima”, invitó al presidente del club Libertad (organizador del concurso en donde iba a participar su hijita) a entregar los premios. ¿Esta invitación (desinteresada) era el amor al chancho o a los chicharrones? Así usa doña Mónica Aurich los recursos de la alcaldía de Lima (que sale de nuestro bolsillo) para promocionar a su hija con don Fernando Burmester. Jalón de orejas para el alcalde de Lima, don Luis Casteñeda Lossio que le permite hacer estas chanchadas.
Además de que el baile de Monica Grados no trasmite nada, su falta de zapateo y faldeo es evidente; es decir, es una más del montón de chicas que hacen las mismas figuras, repetidas hasta el hartazgo y encima es desorejada; y el “chino” Terrones vino de los Estados Unidos subido de peso, sin la agilidad y calidad que mostró hace algunos años, además bailó totalmente de negro y todos sabemos que de luto no se baila en el norte. Evidentemente hubieron muchas parejas superiores a esta y el público (que no se deja engañar fácilmente) mostró su disconformidad con una sonora pifiadera y un largo ¡NOOOOOOOO….! Los únicos que la aplaudieron fueron su barra del Nuevo Tunante y su papá con sombrero de Napoleón, nadie más.
Como ya sabían que ganarían, colocaron con antelación, cuatro cañones con papel picado en las cuatro esquinas del coliseo y en el momento que dijeron sus nombres, estos cañones comenzaron a lanzar papel picado por todo el coliseo y soltaron globos. Ella lo celebró con su lata de cerveza en la mano, bonita imagen para las nuevas generaciones de bailarines. Y todavía existe gente ingenua que piensa que todo esto se hace con buenas intenciones y sin malicia. ¡Señor, porque no los recoges!
Además de que Monica Grados se presentó con una blusa totalmente transparente posiblemente diseñada por “Christian Pior” y el modelo típico del norte de Francia y su pulsera fuera de contexto. Poco faltó para que le dieran el premio al mejor traje típico europeo. Y les aseguro que para el próximo año, ella será la nueva “campeón de campeones”, y no me pregunten porqué. ¡Normal nomás, así funciona la mafia en combinación con la Municipalidad de Lima!. Hay que aguantarlos hasta que se vaya el alcalde Luis Castañeda Lossio. ¡Dios nos coja confesaos, hasta entonces!

7) Categoría Senior: Jorge Mendoza y Nelly Nossar
En esta categoría hubo muy buenas parejas que no llegaron a la final, una de ellas fue la conformada por Pedro Villalobos con Ana Torres que tuvieron que estar entre los tres mejores. La gran mayoría de Seniors tenían bajo nivel en comparación con otras categorías. Hubo una pareja, aparentemente mocheros, con el número 163, ella de traje completo de color rosado y él totalmente de blanco, con un baile tradicional con mucha creatividad. Para mí, ellos debieron ser los auténticos ganadores por personalidad y calidad de baile norteño. La pareja que ganó también estaba entre los tres mejores.

8) Categoría Master: Adela Ahón y Luís Velásquez
En esta categoría la pareja Ahón-Velásquez estaba de lejos, en mejor nivel que sus pares finalistas. Muchas parejas fueron eliminadas por no ser conocidos del jurado, como la pareja de Huacho, con el número 36; él con un terno blanco, con un baile muy norteño, muy galante, tradicionalmente hermoso y respetando la estructura de la marinera norteña. Sin embargo algunas finalistas desconocían la estructura, aaaah…pero eran “amiguitas” del jurado. ¡Ya ven, el Perol da sus resultados! Muchos se preguntaban:…¿Qué hacía la Sra. Liliana Castañeda en el podium?
Los tres finalistas de esta categoría se presentaron de negro, parecía una final de viudos. ¡Jalón de orejas para ellos!

Con respecto a las entregas de Campeonatos:
1) La primera peor entrega de todo el concurso fue la ofrecida por Renato Benavides con Evelyn Bellido de la categoría Senior: Una lástima que profesores de marinera realicen una entrega de tan baja calidad. Si una pareja de bailarines quiere “romper esquemas” entonces lo primero que tiene que hacer es conocer esos esquemas, para después poderlos romper.
Sin embargo, ellos en lugar de romper esquemas, lo único que hicieron fue romper la estructura de la Marinera norteña. Una Marinera sin su estructura no es Marinera, puede ser cualquier otra cosa, menos Marinera. La estructura es la que le da personalidad coreográfica, define el género de este baile y lo perenniza en el tiempo evitando su extinción.
El mensaje de amor no es suficiente en la Marinera. No hicieron los saludos, comenzaron a bailar después del inicio de la Marinera, abusaron de las síncopas y silencios, hicieron figuras acartonadas nada naturales, se notó que forzaron figuras en cámara lenta, no hubo creatividad, pararon la Banda, etc. etc. etc. Si su intención fue llamar la atención, pues lo consiguieron. Evelyn después dijo, frente a las cámaras del canal 7, que fue un “trabajo” de Renato.

Doña Elena Bustamante intentó dar una explicación en la revista “Somos” Nº 1105, diciendo: “…que las entregas de campeonatos permiten coreografías tal vez caprichosas y que no son materia de evaluación”.
Al parecer, doña Elena Bustamante (quien tampoco sabe de Marinera norteña), no sabe o no conoce, que son precisamente la “entregas de campeonatos” los videos más difundidos entre la gente nueva que comienza a aprender y participar en las academias y los concursos; es decir, lo que todos los novatos quieren hacer pensando que este concurso es la “Biblia de la Marinera” y que, todo lo que se hace y se deshace en él, es permitido hacerlo. ¡Porque lo hicieron en Trujillo, pues!
Y algunos “profesores” y “profesoras”, de las mal llamadas “academias” (porque no existen académicos en ellas), sin ningún criterio y tampoco conocimiento, tambien están a la espera de estos videos para “enseñar” y “actualizar” a los incautos aprendices. Es decir, su conocimiento folklorico de la Marinera la obtienen de los concursos. Con profes así, estamos fritos. ¡De los "conocedores" de la Marinera líbranos Señor! (No se porque, pero últimamente me estoy volviendo muy religioso).

2) La segunda peor fue la entrega de Jorge Beteta con Aida Gamboa de la categoría campeón de campeones: Ambos realizaron un baile totalmente sin gusto, sin arte y de figuras repetitivas. En cada presentación los vemos bailar la misma marinera con las mismas figuras, con las mismas ganas. Su baile no trasmite nada, sin creatividad, ni naturalidad. Ya aburre verlos bailar. Son un ejemplo de baile robotizado e insulso ¿Cómo ganaron el campeón de campeones? Pues pregúntenle a Fernando Burmester; él les dará sus acostumbradas respuestas cantinflescas.

3) La tercera peor fue de Sofía Dávila y Jonathan Pacheco de la categoría Juvenil: Ella bailó con un anaco y en su interior un camisón de Rechiliú francés, pero lo peor fue su peinado jamaiquino de “Rasta” con trencitas totalmente descontextualizas. En suma, toda una ensalada “norteña-franco-centroamericana” ¡Viva Bob Marley!...

4) Y el cuarto peor fue el de Carolina Betancour con Gino Morales de la categoría Adultos: Ellos rompieron la estructura y comenzaron a bailar mirando al público, pidiendo y rogando que los aplaudan, sin embargo nadie los aplaudió. Una entrega sin pena ni gloria. ¡Sayonara!

Paradójicamente las categorías pre Infantes: Marcos Donayre y Jessis Cruz; Junior: Claudia Herrán y Rubén Guevara y los Master: Hernán Merino y Martha Aramburu, fueron los que mejor ejecutaron sus bailes de entrega de campeonato. A los que entregan mal, deberían quitarles su banda de campeones, y a los que mejor entregan, deberían darle un premio especial. ¡Si Señor!
Si Uds. son acuciosos en los datos sobre los campeones, tanto del año anterior, como los de este año, van a encontrar un denominador común: el 90% de los campeones son gente de dinero o de “apellido” o de academias “pitucas” (Wong, Plaza Vea, Betancour, Grados Aurich, Nuevo Tunante, Somos Independientes, Chio Calderón, Romero, Gamboa, Rossi, etc.) con algunas excepciones.
¿Es que, acaso los bailarines de dinero o de “apellido”, o niñas bonitas con trajes de dos mil dólares, son los mejores bailarines de marinera norteña? ¿Ellos son los verdaderos representantes de la Marinera del pueblo norteño? Pues esta es una mala interpretación que nos da este concurso, en donde los jurados (ignorantes en marinera y en folklore norteño en general) hacen uso de su prerrogativa de elegir, de acuerdo a sus gustos de clase social “alta”…¿alta?, a los bailarines que se ajusten a sus parámetros mentales de lo que es un comportamiento corporal y artístico de “clase”, a la hora de bailar la marinera. ¡A esto, en buen castellano, se le llama RACISMO!

Ahora, el hecho de que algunas parejas (sin “clase”, pero con plata) estén ganando seguido, nos induce a pensar en la posibilidad, de que el narcotráfico este invadiendo el mercado de los concursos de marinera. Ya que estas personas están comprando parejas de baile, a los que le dan terno, zapatos, hotel, comida, viajes en avión (para el y sus acompañantes) y dinero por bailar con sus hijas. Además les compran muchos vestidos caros, para hacer ver a los demás que manejan mucho dinero; en otra forma de competencia entre burros con plata. Haciendo gala de signos exteriores de riqueza.
A parte de pagar, para que se presenten en diversos festivales, concursos, televisión, etc.; salgan en periódicos, revistas, etc. o viajen a cualquier parte del mundo en donde haya un concurso de marinera. Este despliegue y competencia de dinero por parte de algunos padres de familia, es evidente y está ensuciando la competencia justa y sana de los concursos de marinera.

Sabemos, por buena fuente, que la fiscalía ya está siguiendo los pasos de estos “competitivos” y “generosos papás” de la promoción de “Mosca Loca” y el “Lunarejo” Fernando Zevallos. Se acuerdan que, hace unos años atrás, Fernando Zavallos (Aerocontinente), fue auspiciador del concurso del club Libertad?. Ah pues... ¡Nos vemos en el Concurso de Castro Castro, o en Piedras Gordas!

Con respecto al Mejor Traje Típico:

Es evidente que las personas encargadas de elegir el vestido tradicional norteño en el concurso del club Libertad, no tiene mucha información sobre estos.
Le dieron el primer lugar a un traje de Huaraz, el segundo lugar a un traje de Huanchaco y el tercer lugar a un traje Chaviñero de Ayacucho, al que presentaron como traje típico de Ica. ¿Sabrán los encargados de elegir el vestido típico, que Chaviña queda en Ayacucho y no en Ica? , ¡y que, ninguno de los dos queda en el norte del Perú? TAREA: ¡A repetir las clases de Geografía del Perú!

Con respecto al Campeón de Campeones:
Se eligió a la pareja menos mala, ya que Fabricio Varela bailó bien, pero su pareja estaba fuera de forma, y sin recursos de baile. Es decir nada rescatable en esta justa. La categoría debió ser declarada desierta por mala.

Conclusiones:
- Este año se pudieron apreciar algunos vacíos en las tribunas, como no había ocurrido años anteriores con el público.
- Muchos bailarines ya se desengañaron de este concurso y ya no quieren participar. Les tuvo que ocurrir para que abrieran los ojos.
- Ha habido más participación de gente nueva (que piensa que este concurso es limpio, por ahora).
- Ya nadie crea en el baile, todos repiten las mismas figuras reensayadas. Producto de los profesores y profesoras de videos, sin conocimientos de folklore y cultura popular tradicional.
- Todos tratan de imitar a los campeones y nadie genera baile propio (personalidad de baile).
- Se están imponiendo modas: en los vestidos, ternos, peinados, fajas, pañuelos, vinchas, pasos, figuras, coreografías, etc. Producto de la falta de conocimientos folklóricos norteños en estos temas.
- Ahora se compran también parejas de baile.
- Algunos campeones o campeonas de Trujillo cobran un dineral por “enseñar” (como si fuesen profesores profesionales) a la gente nueva que recién entra al mundo de la marinera. Hasta que se dan cuenta de que, un campeón (a) de Trujillo, no es sinónimo de buen profesor o profesora, pero ya los exprimieron. (Escuché una conversación entre dos niña que decían: “mientras tu pagaste 1,500 soles por diez clases a tu profesora campeona de Trujillo y te eliminaron el primer día; yo pagué 30 soles a mi profesora de los olivos por un mes de clases y llegué hasta la final del domingo”).
- El nivel de baile ha decaído notablemente. La técnica y la velocidad tienen mayor valor que la creatividad y el sentimiento de baile. Nadie baila con las melodías, solo hacen figuras prefabricadas.
- A la marinera la está envasando, en coreografías y figuras que están fuera del ámbito folklórico.
- El baile robotizado y de puntas está de moda, de tal manera que algunas academias están “promocionando” la Marinera desechable.
- Cada año la “Marinera Académica” se va alejando, cada vez más, de la Marinera Tradicional que le ha dado origen, GRACIAS A ESTE CONCURSO.
- Muchos creen que la Marinera es un tema de libre mercado, como nos quieren hacer creer algunos “profesores” y “academias”. Aquí esta en juego la moral, la ética y la protección de nuestro Patrimonio Cultural norteño. Tenemos que tomar partido. O la defendemos, o ayudamos a su extinción. Uds. deciden.
- Así como, cuando una lengua o idioma que es hablado por solo 1,500 personas es considerada en extinción, así también se va extinguiendo un baile tradicional cuando no es enseñado o conservado como tal. De tal manera que, si seguimos esta tendencia, dentro de pocos años, también la Marinera tradicional se habrá extinguido de la faz de la tierra para siempre, y con ella toda la carga cultural que conlleva su práctica social tradicional. Solo nos quedará la Marinera académica “enlatada” que nos promocionan algunos mercaderes de la Marinera.

¡La Marinera tradicional, que ha dado origen a los concursos, aun esta viva. Aprendamos a conocerla, amarla, disfrutarla y preservarla!
¡La Marinera tradicional es la que nos da identidad, la que nos identifica como peruanos, es la que el pueblo ha creado desde hace ya dos siglos de vida!
La Marinera académica se creó en la década del 50, en la “Escuela de Música y Danzas del Perú”, de la Srta. Rosa Elvira Figueroa.
El primer concurso registrado se realizó en Lima en 1900, en el antiguo teatro “Olimpo” (después Forero y hoy Municipal). Allí campeonó don Pepe Ezeta (integrante de la Palizada) con doña Sara de Somocurcio (Arequipeña).